macadamia

La clave de su éxito es su composición perfecta y equilibrada de ácidos grasos esenciales, que consiguen reparar las pieles más secas y maduras, a la vez que equilibran la producción de sebo de los cutis grasos. Su alto contenido en ácido linoleico restaura la función de barrera de la piel, impidiendo la pérdida de agua, la infiltración de organismos perjudiciales y los daños ambientales en la dermis, permitiendo que se mantenga hidratada y saludable, pareciendo más joven y suave.

Fortalece el cabello débil y sin brillo, aumenta la resistencia de la hebra, evita el encrespamiento y facilita el laceado. Las propiedades reconstructivas del aceite lo convierten en un gran agente para tratar las puntas secas y reparar el cabello dañado.

• 100% natural.
• Antioxidante.
• No obstruye los poros.
• Ideal para pieles secas y maltratadas.
• Evita el encrespamiento del cabello.
• Nutre e hidrata la piel, cabello y uñas.
• Calma el picor y el enrojecimiento de la piel.
• Repara la hebra capilar y las puntas abiertas.
• Previene el envejecimiento prematuro de la piel.
• Aclara las manchas y aporta luminosidad a la piel.
• Previene y mitiga las arrugas y líneas de expresión.
• Las proteínas que contiene aportan elasticidad y firmeza en la piel.