febrífugo.

Antiinflamatorio, antiséptico, febrífugo y estimulante, entre otras propiedades. Regula la secreción sebácea y crea en la piel una sensación de frescura parecida a la que produce el mentol, por lo que son muy conocidos los bálsamos para piernas y pies cansados, que poseen alcanfor en sus recetas.

Puede ser utilizado en casos de acné, inflamaciones, artritis, dolores musculares, esguinces, reumatismo, bronquitis, tos, resfriados, fiebre, gripe y otras molestias del aparato respiratorio, ya que produce una refrescante sensación de alivio.

• Antiinflamatorio.
• Antiséptico y febrífugo.
• Hidrata y suaviza la piel.
• Sin perfumes ni colorantes.
• Regula la secreción sebacea.
• Ideal para piel grasa y con acné.
• Brinda alivio a dolencias respiratorias.
• Aporta una sensación de frescura en la piel.